Todas las enseñanzas te dicen que lo primero que debes hacer en las mañanas es una meditación, conectarte en silencio con Dios (si no trata de hacerlo en el transcurso del día), luego agradecer este nuevo día que Dios te regala, sentir gratitud por todos los dones que se te han otorgado, agradece, no te quejes si está nublado, si hace demasiado calor o frío; sigue agradeciendo y piensa que hoy es un día espectacular y grábatelo, dilo con convicción y piensa qué regalo te darías hoy; luego ve a la ducha y mientras el agua limpia tu cuerpo usa tu imaginación, que estás limpiando tu mente, que esa agua sale oscura, sacando todas las impurezas de tu pensamiento, hasta que sientas que está clara que te sientes liviano que irradias luz tal como si fueras pare del sol. Ahora sonríete y trázate lo bueno que quieras alcanzar o hacer por ti o por alguien. Y si alguien te pregunta ¿cómo estás? Contesta con audacia: espectacular o fantástico.
Aprende a comprender que es importante no guardar rencor por nada ni por nadie, a perdonar y perdonarte para que tu vida resulte más fácil, que en este camino que transitas, con los seres que te encuentres, tienes que compartir lo bueno y lo malo, porque son los maestros que nos enseñan y que de acuerdo a la calidad de la intensidad emocional que le pongas en esos instantes será como vivas a partir de ese momento.
Si te ciega el odio o el rencor eso es lo que volverá a ti, si iluminas con el amor del perdón, tú serás el iluminado, si bendices, tú serás bendecido.
Quiera Dios que la Luz del Amor siempre esté contigo.
Aprende a comprender que es importante no guardar rencor por nada ni por nadie, a perdonar y perdonarte para que tu vida resulte más fácil, que en este camino que transitas, con los seres que te encuentres, tienes que compartir lo bueno y lo malo, porque son los maestros que nos enseñan y que de acuerdo a la calidad de la intensidad emocional que le pongas en esos instantes será como vivas a partir de ese momento.
Si te ciega el odio o el rencor eso es lo que volverá a ti, si iluminas con el amor del perdón, tú serás el iluminado, si bendices, tú serás bendecido.
Quiera Dios que la Luz del Amor siempre esté contigo.